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jueves, 4 de diciembre de 2014

Xabeca de Almadén participa en los actos del Día Internacional de las Personas con Discapacidad celebrado en Diputación



Las personas con discapacidad piden que se hagan efectivos sus derechos.
 
El miércoles, 3 de diciembre, se conmemora el Día Internacional de las Personas con Discapacidad, una fecha instaurada por Naciones Unidas en 1992 para concienciar al planeta de la existencia de estos ciudadanos, de sus necesidades y particularidades.
 
La realidad actual es que, en general, las personas con discapacidad tienen peor calidad de vida que el resto de los ciudadanos, ya que su acceso a la educación es menor y, como consecuencia, su inserción laboral también es más baja, lo que a su vez las condena a tener tasas de pobreza más altas que las personas sin discapacidad. Por este motivo, las organizaciones que representan a estos ciudadanos aprovechan el Día Internacional de la Discapacidad para reivindicar sus derechos y solicitar medidas que abunden en la mejora de la calidad de vida de este colectivo. En Ciudad Real la asociación Laborvalía ha elaborado un decálogo de derechos a partir de la Convención de Derechos de las personas con Discapacidad.
 
La incorporación de las personas con discapacidad al mercado de trabajo, el establecimiento de políticas para lograr el acceso al mundo laboral, adquirir un papel más activo en la sociedad y también una mayor autonomía personal, que se potencie su integración en la comunidad, así como una mejor atención por parte de las Administraciones a sus anhelos han sido las principales reivindicaciones que se han vertido en el salón de plenos de la Diputación provincial de Ciudad Real con motivo de la celebración del Día Internacional de las Personas con Discapacidad.
 
El presidente de la Diputación, Nemesio de Lara, acompañado por el vicepresidente Ángel Caballero, ha moderado un original Pleno que ha contado con unos diputados y diputadas de excepción: usuarios de los 16 centros ocupacionales de la provincia, integrados en la Asociación Laborvalía, y miembros de diferentes asociaciones.

 Los usuarios de estos centros han ido leyendo, uno a uno, el decálogo de derechos que a partir de la Convención de Derechos de las personas con Discapacidad ha elaborado la Asociación Laborvalía.
 
Así, Piedad Caro, de Valdepeñas, apostó por la participación plena y efectiva en la sociedad de las personas con algún tipo de discapacidad, en igualdad de condiciones con las demás.

 Mari Cruces, del centro Azuer de Daimiel, recordó que todos los seres humanos tienen el derecho inherente a la vida y pidió que se adopten todas las medidas necesarias para garantizar el goce efectivo de ese derecho.
 
Desde Manzanares, Daniel Jiménez recordó que la discriminación contra cualquier persona constituye una vulneración de la dignidad del ser humano y recordó que todas las personas son iguales ante la ley.

 Del centro Fuenteagria, Ada María Fernández apostó por una educación inclusiva, sin discriminaciones, y desde Almadén Vicente Fuentes alzó la voz para recordar que todas las personas tienen derecho a vivir de forma independiente y a participar plenamente en todos los aspectos de la vida.

 Ana García, del centro Fuensanta, indicó que ellos tienen derecho a trabajar en igualdad de condiciones que los demás, desde La Solana, Carmen Bueno pidió la eliminación de barreras físicas y mentales en las zonas urbanas y rurales, y Julián Beldad, de Herencia,  indicó que las personas tienen derecho a gozar del más alto nivel posible de salud sin discriminación alguna.
 
Paulina Lorente, de Malagón, recordó el compromiso de adoptar las medidas pertinentes para que todas las personas puedan desarrollar y utilizar su potencial creativo, artístico e intelectual, David Garrido, de Autrade, recordó que la Convención de Derechos de las Personas con Discapacidad establece que se fomentará la constitución de organizaciones que les representen y su incorporación a las mismas, y Ana belén Sedán, de AFAD Tomelloso, recordó su derecho a ejercer la libertad de expresión y opinión.
 
Los últimos en interevenir en el Pleno fueron Ariadna Carvajal, de la Asociación Caminar, quien recordó el compromiso de adoptar las medidas para desarrollar plenamente el potencial humano y el sentido de la dignidad y la autoestima, y reforzar el respeto por los derechos humanos, las libertades fundamentales y la diversidad humana, y Jose Muñoz, de Apafes, quien apostó por la plena y efectiva participación de las pesonas con algún tipo de discapacidad en la vida política y pública en igualdad de condiciones con los demás.
 
Al final del acto, los “diputados por un día” entregaron a Nemesio de Lara una copia de este decálogo, elaborado para la ocasión, que también ha sido entregado a empresas, entidades e instituciones que han demostrado su sensibilidad y compromiso con las personas con discapacidad.
 
Este decálogo, “sello de calidad” de Laborvalía ha ido a parar este año al Ayuntamiento de Malagón, el colegio Carrasco Alcalde, de Herencia, el IES Dámaso Alonso de Puertollano, la escuela de Almadén o diversos establecimientos, entre otros.
 
Derecho a vivir una vida plena
 
El presidente de la Diputación de Ciudad Real, Nemesio de Lara, reclamó, con motivo del Día Internacional de las Personas con Discapacidad, que se lleven a cabo políticas que beneficien a las personas con discapacidad. Lamentó que sigan existiendo barreras, “las peores son las mentales”, y apostó por luchar contra ellas desde la educación.
 
“Tenéis derecho a vivir una vida plena y a disfrutar de vuestra propia sexualidad”, añadió De Lara quien indicó que debería penalizarse la discriminación premeditada, al tiempo que apostó porque la educación formal y no reglada “sea un derecho para todas las personas”.
En relación al empleo, añadió que la tasa de actividad de las personas con discapacidad es del 37% y la tasa de empleo de apenas un 24% “una cifra penosa”. Animó a los presentes en el pleno a “protestar y reclamar cuando os encontreis una barrera del tipo que sea”, y a luchar “contra la mercantilización o economización” de la salud.
 
Por último, recordó que el “derecho a la diferencia no puede ser una diferencia en los derechos”, y agradeció públicamente el gran trabajo que desarrollan Laborvalía, las diferentes asociaciones, y los profesionales “que tenéis la gran suerte de trabajar con personas discapacitadas”. Asimismo, agradeció “la manera de ser de nuestros chicos y chicas que celebran con sim patía este día”.


Fuente: lanzadigital.com/Aurora Galisteo

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