Acuasur concluye la instalación de red que llevará el agua hasta la comarca de Almadén, en Ciudad Real, aunque las conducciones aún no está operativas. En Córdoba está pendiente la estación de bombeo.
Casi cinco años han pasado desde que se dio por finalizada la construcción del embalse de La Colada, en la comarca de Los Pedroches, y aún no es posible que esta infraestructura cumpla con alguna de las dos misiones para el que se construyó: abastecer a los municipios de la zona Norte de Córdoba y hacer lo mismo con hasta nueve localidades del Sur de Ciudad Real, concretamente en el entorno de Almadén. Así, fue a finales de 2006 cuando la ejecución de la presa se dio prácticamente por finalizada y en la primavera de 2007 cuando comenzó a acumular los primeros hectómetros de agua. Desde entonces, se han ido sucediendo una serie de actuaciones para que el pantano pueda realizar su cometido original, pero esa tarea todavía está por llegar.
En el caso de los municipios cordobeses, es la Junta de Andalucía la que tiene atascado el proyecto de distribución del líquido, puesto que aunque sí está instalado todo el entramado de tuberías, no está resuelta un modificado de proyecto valorado en dos millones de euros y que la Consejería de Medio Ambiente busca cómo financiar. Así, la Administración autonómica ha confirmado que "el proyecto inicial de las conducciones y la estación de bombeo requiere un modificado valorado en dos millones de euros, que afecta al suministro eléctrico" y que se "ha reprogramado esta actuación, que se acometerá en cuanto tenga la financiación necesaria".
Pero además, la sociedad estatal Aguas de las Cuencas del Sur (Acuasur) ha dado por finalizada la construcción del ramal de tuberías que porteará agua desde el embalse de La Colada hasta la zona de Almadén, ya en la provincia de Ciudad Real. Estas obras tienen como misión abastecer una serie de municipios en el Sur de Castilla-la Mancha con deficiencias en este aspecto, si bien fuentes de Acuasur han confirmado a El Día que "las obras están terminadas, pero todavía no han entrado en servicio". Así, se da la paradoja de que, por el momento, el embalse de La Colada sólo puede almacenar agua, nada más.
En el caso del suministro a Castilla-la Mancha, en una primera fase las obras a ejecutar han consistido básicamente en la conducción de agua bruta desde el embalse de La Colada hasta la estación potabilizadora de Almadén, donde se trataría y desde las que se distribuiría al resto de poblaciones. La conducción tiene una longitud aproximada de 40 kilómetros, con dos tramos claramente diferenciados, uno de impulsión de unos 13,3 kilómetros y conducción de gravedad con una longitud de unos 26,7. El conjunto de las actuaciones superan los 20 millones de euros.
A falta de que el embalse tenga alguna utilidad, Acuasur ha previsto nuevos proyectos en el embalse. El último de ellos consiste en una planta de bombeo que permite recoger la escorrentía de los caudales ordinarios del arroyo Guadarramilla (arroyo que incorpora recursos a la presa) de tal manera que "garantice en mayor medida la calidad del agua embalsada en la presa de La Colada. Los objetivos perseguidos con el proyecto son, por un lado, "garantizar la calidad del agua embalsada" en el pantano de La Colada, así como evitar que "las aguas afectadas por los aprovechamientos ganaderos de la zona, con gran concentración de purines durante períodos de estiaje, lleguen al embalse. Esta actuación supondrá una inversión de 1,57 millones de euros y un plazo máximo de ejecución de seis meses.
Pero además, la sociedad estatal Aguas de las Cuencas del Sur (Acuasur) ha dado por finalizada la construcción del ramal de tuberías que porteará agua desde el embalse de La Colada hasta la zona de Almadén, ya en la provincia de Ciudad Real. Estas obras tienen como misión abastecer una serie de municipios en el Sur de Castilla-la Mancha con deficiencias en este aspecto, si bien fuentes de Acuasur han confirmado a El Día que "las obras están terminadas, pero todavía no han entrado en servicio". Así, se da la paradoja de que, por el momento, el embalse de La Colada sólo puede almacenar agua, nada más.
En el caso del suministro a Castilla-la Mancha, en una primera fase las obras a ejecutar han consistido básicamente en la conducción de agua bruta desde el embalse de La Colada hasta la estación potabilizadora de Almadén, donde se trataría y desde las que se distribuiría al resto de poblaciones. La conducción tiene una longitud aproximada de 40 kilómetros, con dos tramos claramente diferenciados, uno de impulsión de unos 13,3 kilómetros y conducción de gravedad con una longitud de unos 26,7. El conjunto de las actuaciones superan los 20 millones de euros.
A falta de que el embalse tenga alguna utilidad, Acuasur ha previsto nuevos proyectos en el embalse. El último de ellos consiste en una planta de bombeo que permite recoger la escorrentía de los caudales ordinarios del arroyo Guadarramilla (arroyo que incorpora recursos a la presa) de tal manera que "garantice en mayor medida la calidad del agua embalsada en la presa de La Colada. Los objetivos perseguidos con el proyecto son, por un lado, "garantizar la calidad del agua embalsada" en el pantano de La Colada, así como evitar que "las aguas afectadas por los aprovechamientos ganaderos de la zona, con gran concentración de purines durante períodos de estiaje, lleguen al embalse. Esta actuación supondrá una inversión de 1,57 millones de euros y un plazo máximo de ejecución de seis meses.
Fuente: eldiadecordoba.es
1 comentarios:
Felicidades por el blog, he descubierto muchas cosas nuevas!
Saludos de un vasco de nacimiento y segoviano de adopción, nos leemos.
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